Para la mayoría, llegar a la vejez resulta un proceso difícil, para otros es aceptar con los brazos abiertos lo inevitable y un llamado para disfrutar de la vida más que nunca. Sin embargo, la vejez siempre viene acompañada de enfermedades y afecciones propias de un cuerpo que se viene deteriorando desde los 25 años, que es la edad promedio en que terminamos de desarrollarnos.
Nuevas corrientes de ver la vejez están llegando en manos de científicos que aseguran que este proceso natural, de hecho, debería de verse como una enfermedad. Al menos así lo ve David Sinclair, codirector del Centro de Biología de la Facultad de Medicina de Harvard, específicamente dedicado a la investigación del envejecimiento.
Sinclair apunta que la humanidad va rumbo a una era de longevidad, y no es nada nuevo si tomamos en cuenta que hace tan solo cien años la esperanza de vida era de 70 años, ni decir de la edad media, donde era toda una hazaña que un niño llegara a los 12 años, y un adulto a los 30.
La longevidad de la humanidad aumenta con respecto a los avances tecnológicos y médicos, y como la tecnología continuará avanzando, comprenderemos más nuestro cuerpo y encontraremos formas cada vez más innovadoras de conseguir vivir más años.
La vejez es una enfermedad porque trae consigo verdaderas enfermedades
Menciona Sinclair en su publicación en Nature Aging, que el envejecimiento debería de comenzar a verse como una enfermedad, porque si se considera de este modo, se abrirá el panorama a un avance médico y científico que permita tratarla con todo lo que implica.
Parkinson, Alzheimer, enfermedades cardiovasculares y cáncer, solo es el comienzo de una larga lista de afecciones que vienen con la edad. Por lo que tratar la vejez también englobaría minimizar la aparición y el impacto de estas enfermedades desde la raíz.
Pero en el trabajo de investigación de Sinclair no se trata meramente de un asunto de bienestar, pues de hecho, varios países están mostrando interés en extender una esperanza de vida saludable debido a los altos costes que significa este sector de la población.
Todo esto tomando en cuenta que, si en la actualidad las personas son capaces de vivir más tiempo, llegará un momento donde la porción de humanos en el mundo que lleguen a la tercera edad al mismo tiempo será exorbitante a comparación de décadas pasadas.
Esto significaría a muchos gobiernos del futuro tener que mantener a millones de ancianos que ya no es productivo económicamente, y a que además necesitarán de constante inversión para satisfacer sus necesidades como pensiones y constantes uso de servicios médicos que requieren también tratamientos costosos.
32 billones de euros es el costo de un año extra de vida
En Reino Unido y Estados Unidos, expertos están calculando cuánto dinero le costaría a las naciones que sus habitantes vivieran un año más, y la conclusión fue de 38 billones de dólares.
Por eso, han creado un concepto llamado Valor Estadístico de la Vida (VSL), que significaría el valor económico equivalente a las ganancias de una persona si fuese más longevo, pero también más saludable y su etapa de vejez fuese de mejor calidad a la actual.
Con este concepto tratan de demostrar que si se tratara la vejez como une enfermedad para desarrollar métodos de longevidad que también extiendan la salud y un mejor estilo de vida los beneficios serían factibles, a comparación de simplemente ser más longevos pero con una salud deteriorada como las personas que superan los 90 años en la actualidad.
Por ahora, las miradas están puestas en tratamientos antienvejecimiento basados en metformina, un medicamente que se utiliza actualmente para tratar la diabetes, pero que se han observado ciertos efectos positivos sobre el envejecimiento.
Algunos sugieren que un tratamiento innovador con este fármaco, podría aumentar la esperanza de vida, erradicando enfermedades como las cardiovasculares y el cáncer. Sin embargo, también se trata de predecir escenarios donde apostar por la longevidad pueda jugar en contra.
Uno de estos escenarios pudiera ser que las terapias antienvejecimiento se volvieran altamente costosas, lo que ya no sería factible pues solo los pudientes podrían tener acceso a este privilegio. Así que ahora la carrera se enfoca en buscar un tratamiento económico para garantizar que todos tengan acceso a ella.